martes, 4 de diciembre de 2012

DICIEMBRE. BREVERISMOS Nº 4

En vista del éxito de crítica y público que tuve con mi disfraz de La Criollita (recordad que Quino Collantes es solo un seudónimo) publico otra imagen de aquella fiesta de disfraces en La Habana, a la que acudí del brazo del comandante Fidel. 
Que no se preocupen quienes, precisamente, se preocupan por mi identidad sexual -legendaria en los cinco continentes- ya que solamente me queda otra fotografía de aquel histórico evento, que ya os ofreceré en su momento.
En cuanto a los Breverismos, aquí están los que os ofrezco este nublado 4 de diciembre de 2012.






1160)  SIAMESAS  
 Después de una acalorada discusión, las hermanas siamesas estuvieron meses sin hablarse.

1207)  IMPRESCINDIBLE 
 El que se creía imprescindible dejó de serlo, para su sorpresa, en cuanto decidieron prescindir de él.

1245)  ALFOMBRA MÁGICA  
 La alfombra mágica que volaba sobre el cielo de Bagdad fue derribada por un misil. La cosa no estaba para cuentos.

Recomendación de hoy: Dejad de ver, en el caso de que lo hagáis, y si no no veáis nunca, pero nunca, nunca, nunca, esa espantosa cadena de televisión que lleva el nombre de Telecinco. Incluso si os acercáis al televisor si la tenéis sintonizada observareis que sale un tufo a pestilente basura. 
Os recomiendo que, a cambio, os dediquéis a observar el movimiento constante de las nubes o el fuego crepitando en la chimenea... dónde vas a comparar. Mejorará vuestro equilibrio y nivel intelectual, os lo puedo asegurar. 
Además, entre contemplación y contemplación de las nubes y el fuego siempre podéis intercalar la lectura de un buen libro, como por ejemplo La Montaña del Alma, de Gao Xingjian, Premio Nobel del año 2000, o escuchar los Cuartetos de Cuerda de Beethoven
O hacer lo que queráis... menos ver esa horrible cadena de TV.






3 comentarios:

  1. esta señora está muy gorda por ver tele 5 en demasía

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  2. Os lo he dicho mil veces: ver Telecinco perjudica seriamente la salud.

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  3. totalmente de acuerdo. Yo dejé de ver Tele 5 y adelgacé cinco kilos de la satisfacción. Además duermo mejor desde que no veo sus horribles telediarios.

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