BREVERISMOS. MIÉRCOLES 27 DE NOVIEMBRE DE 2013

-¡El que esté libre de pecado que tire la primera piedra!- dijo Jesucristo… y se llevó la sorpresa de que un sordo que asistía a la lapidación le pegó una tremenda pedrada a la mujer acusada de adulterio.

Para que luego digan que este blog es anticlerical. Hoy empiezo con la historia –que bonitos cuentos nos cuentan- de la mujer que iba a ser lapidada por adulterio, a la cual Jesús protegió. Nos lo cuenta Juan en 8: 1-7: Los maestros de la Ley y los Fariseos llevaron ante Jesús a una mujer sorprendida en adulterio, y le dijeron:

            -Maestro, hemos sorprendido a esta mujer en el acto mismo del adulterio. Y según la Ley de Moisés hay que lapidar a tales mujeres. ¿Tú que dices?

            Y Jesús les contestó:

            -¡El que esté libre de pecado que tire la primera piedra!

            Todo esto viene a cuento del recuerdo hacia mi querida Amy Winehouse, mi amiga peinada por un peluquero de la ONCE. 

Ya estoy harto de los puritanos que tiran piedras a los que son, a su juicio, pecadores. Hipócritas autoinvestidos de aureolas de seriedad, cordura y hasta santidad que, generalmente, envidian los vicios que critican y hasta los apedrean, frustrados como están al no haberse atrevido a tirarse de cabeza en ellos. Hombres y mujeres que se embrutecen dedicándose a trabajar todo el día para llegar agotados a casa por la noche, dispuestos a soñar las fantasías que no se atreven a llevar a cabo, mientras ven el televisión lo que hubieran querido ser y hacer. Gentes que se apresura a tirar la primera piedra para que todos vean que son lo puros y respetables guardianes de la moral y el orden establecido.

De esos conozco unos cuantos, hombres sobre todo, que sus mujeres, orgullosas de tener un muermo en casa, comentan: “mi marido es perfecto; de casa al trabajo y del trabajo a casa”… que es una frase de las más espantosas que conozco.

            Pues mi querida Amy Winehouse era todo lo contrario a lo que dicta ese orden establecido por los que así les ha interesado establecerlo. Y aunque todos la conocéis os recordaré que la británica Amy Winehouse, además de cantante de voz profunda y desgarrada, era una gran compositora de sus propios temas. Mujer brillante, extravagante y extraña como solamente son los grandes, estaba adornada por los tatuajes más horrorosos que he visto en mi vida, que hasta en eso era original. Su peinado de cinco pisos al más puro estilo de los prehistóricos cardados y sus ojos pintados como Nefertiti hacían que se parara el tráfico cuando cruzaba la calle… y no por un paso de cebra, precisamente.

            Pero en cuanto se ponía a cantar ya era otro cantar, que se dice. Y aquí os pongo su Rehab, para demostrarlo, una mezcla de todos los estilos musicales, sobre todo jazz, soul, R&B y ska.

            Amy se fue en 2011, a los 28 años, pero aquí queda su recuerdo y su música. ¿Y qué quedará de los que tiran la primera piedra? En el año 2010 vetaron su entrada en Estados Unidos para cantar, como estrella invitada, en la entrega de los Premio MTV o los Emy. Nada menos que la hipócrita Justicia estadounidense vetando a una cantante que, a su juicio, era la representante de todos los vicios. ¡Qué cosas! 

Así que, a los puritanos que lean esto –aunque dudo que haya alguno ya que blog a su gusto los hay a cientos- les aconsejo que se tomen un buen gin-tonic fresquito y, ya puestos, hasta que se fumen un peta, que a lo mejor su aburrida y vulgar vida mejoraba… y hasta comprobaban que el cielo es azul y está lleno de nubes y estrellas. 

Breverismos

355)  POLIFENOLES

Le convencieron tan intensamente de que los Polifenoles –alcoholes aromáticos presentes en el vino tinto- mejorarían su salud, que el Abstemio Hipocondríaco se convirtió por decisión propia en Alcohólico Anónimo… eso sí, con una salud de hierro.

4794)  DARSE A LA BEBIDA

Al no tener dinero ni para darse a la bebida asumió sus desgracias con entereza… y todos creyeron que era un hombre ejemplar.

5614)  CONTRAPESO ETÍLICO

Le encantó que el psiquiatra le dijera que el alcohol era el contrapeso  necesario ante sus dificultades… y que no le llamara borracho, como todos.

Comentario:

Al gran Ray Charles le acusaron de borracho y drogadicto. Y el contestó:

        -Soy ciego, negro y vivo en Estados Unidos, ¿como quieren que lo sobrelleve?

Mañana, a otra cosa.