Nos ha dejado mi amigo José
Hernández, más amigo aún de mi amigo Juan Manuel Muñoz Aguirre, aunque
amigo de todos los que tuvieron la suerte de conocerlo.
Pintor de los que no
dejaron de pintar ni un solo día nos ha dejado, por lo tanto, y para suerte
nuestra, una obra enorme en calidad y cantidad comparable a la que solamente
dejan los elegidos. Pintor, dibujante y grabador también dejó su impronta -¡y
cómo!- en la ilustración de libros y la escenografía.
Un hombre del Renacimiento,
en el más extenso sentido de la palabra… con la diferencia de que al contrario
de muchos pavos reales de aquella época (y de esta) era un hombre sencillo y
modesto, como solamente lo son los humanos inteligentes.
O, como decíamos
quienes lo conocíamos, era el Hombre que Estiraba el Tiempo, haciendo que los
días tuvieran más de veinticuatro horas, pues al ver su producción de un año
nos preguntábamos: de dónde sacara tiempo.
Su obra pictórica, barroca y misteriosa, es la más conocida y divulgada, así que he decidido
poner una pequeña muestra de todos, o casi todos los campos que abarcó.
Alérgico a las modas su mundo era su estudio, lugar de sus conversaciones, inteligentes y pausadas, con sus colegas y amigos.
Pero como sus cuadros son los más conocidos os presentaré ejemplos de sus otros trabajos, como el de cartelista.
O el cartel anunciador del Festival de Teatro Clásico de Almagro.
O para la película Nazarín, de Luis Buñuel
Lo que creaba un
problema para los espectáculos que anunciaba ya que, manos anónimas arrancaban
los carteles de las paredes para llevárselos a sus casas al considerarlos una
obra de arte, original y espectacular, tan alejados de los carteles convencionales.
El grabado, junto a la pintura fue la constante en su obra, pues
el se consideraba, ante todo, grabador, oficio antiguo en el que “se respiraba
tinta que, a través de la piel, te llegaba al corazón”. Fue Director de la Calcografía Nacional
Su producción como dibujante es enorme puesto que para el resto de
sus obras partía siempre del dibujo, ya fueran preparativos de cuadros o
grabados, o como bocetos para ilustraciones, figurines y escenografías
teatrales.
Pero quizá mi mayor admiración
la provocaban sus colaboraciones teatrales con los grandes autores y directores
españoles, especialmente con Francisco
Nieva con quien trabajó, creo recordar en al menos seis o siete obras.
Inolvidable su trabajo en la obra del autor citado titulada Pelo de Tormenta, obra barroca que
parecía haber sido escrita para que solamente José realizará decorados y
figurines.
Pelo de Tormenta fue prohibida por la ignorante censura cuando en 1973 el empresario la presentó al comité de censores. Le respondieron por escrito que los protagonistas, el Obispo y la Abadesa , eran tratados sin respeto, que el coro de monjas era inaceptable, que el demonio salía triunfador y que aparecían desnudos parciales en escena.
Antes de
prohibirla definitivamente, el censor, don José Luis Vázquez, la remitió a un
censor religioso, que ratificó la prohibición, aumentando los cargos en contra.
La obra se estrenó en el Teatro María Guerrero 25 años después, con
un éxito espectacular. José También trabajó con Miguel Narros, José Luis Gómez, Carlos Saura y Jaime Chávarri, entre otros.
Quiero terminar con su obra más
sencilla y menos conocida: los ex libris, muestra, una más, de su gran talento
Breverismos
Hoy le dedico estos
Breverismos teatrales ya que, conocedor del teatro y los actores, sé que
sonreiría al leerlos.
1854) ATAQUE DE
PÁNICO
Un ataque de
pánico lo apartó definitivamente de los escenarios el primer día de su estreno
como actor. Y nadie lo lamentó. Ni siquiera él: era el peor actor del mundo,
aunque él creyera lo contrario.
3541) EGO
El actor tenía
un ego tan pronunciado que le salió a la superficie en forma de chepa.
4186) TEATRO RELIGIOSO
De las
ceremonias religiosas griegas nació el teatro. Y hoy día sólo distinguimos la
misa del teatro en que en una huele a incienso y en la otra pagamos entrada.
El lunes más de otro tema, que ya sabéis que no paro.
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