BREVERISMOS. MARTES 2 DE ABRIL DE 2013

Esta mañana, después de tan lluviosos días me he puesto a secar, como un gato mojado, junto a la ventana… para seguir contemplando la lluvia, que no cesa.   

Ya sabíamos que la Semana Santa traía agua, pero lo cierto es que el parque que hay frente a mi casa está totalmente anegado. Mirad cómo quedó mi coche, a remojo e invadido por cisnes que no sé muy bien de donde salieron.

Menos mal que la ministra Ana Mato, como no tenía otra cosa que hacer aquella mañana, vino a consolarnos, a mí y a los cisnes. Y la verdad es que la visita nos emocionó mucho, pero nuestras lágrimas pasaron desapercibidas al confundirse con gotas de lluvia.

 Y más que nos emocionó cuando la ministra sacó ese cartel del bolso, ya que supusimos que el cambio que anunciaba sería que se pondría ella misma a achicar el agua del parque, para que mi coche quedara libre.

     Ah, se me olvidaba: se enfadó muchísimo porque uno de los cisnes, que era inglés, la saludó con un afectuoso How are you? (¿cómo está?) Y como a ella le sonó como “Jaguar yu” pensó que el cisne le tiraba una indirecta referente al coche que su marido tenía en el garaje de casa, ese que ella nunca había visto.

Breverismos lluviosos

545)  LLUVIA ARTIFICIAL

Ante la preocupante falta de lluvia, el Laboratorio Europeo de Física de Partículas (LEFP) desarrollará en su acelerador de alta energía la influencia de los rayos cósmicos galácticos sobre las nubes, para provocar lluvia sobre Almería a partir de las interacciones microfísicas entre dichos rayos y dichas nubes.

Nota: Si falla el experimento, los científicos sacarán en procesión al Santo Patrón.

5233)  PARAGUAS

El paraguas de diseño apenas resguardaba de la lluvia, pero era precioso.

5566)  LLUVIA EN SEVILLA

-La lluvia en Sevilla es una pura maravilla –es lo primero que aprendió en español el estudiante inglés. Y cuando llegó a Sevilla provisto de gabardina, botas de agua y paraguas no llovió en ocho meses.

Recomendación de hoy:

Hoy, siguiendo con la lluvia, os recomiendo un libro excepcional: La lluvia amarilla, de mi amigo Julio Llamazares. Editado en 1988. Me lo recomendó hace mucho un buen amigo, y siempre se lo agradeceré.  

Narra el monólogo del último habitante de un pueblo del Pirineo que se fue despoblando lentamente. Nos habla de la lentitud del tiempo que pasa y de sus recuerdos, cuando en el pueblo fluía la vida.

     Os lo recomiendo especialmente.

Y siguiendo con la lluvia, os recomiendo dos pelis.

La primera es También la lluvia, dirigida en 2010 por la grandísima Iciar Bollaín, con la presencia de dos actores como las copas de dos pinos: Luis Tosar y Gael García Bernal. La película cuenta, además, nada menos que con el guión de Paul Laberty, el escritor escocés, guionista habitual del director Ken Loach. En el año 2005 el Festival de Cannes premió con la Palma de Oro la película El viento que agita la cebada, dirigida y escrita por ambos que, de paso, también recomiendo.

Y claro, hoy no podía faltar la pequeña frivolidad de Cantando bajo la lluvia, un clásico que imagino habréis visto unas doscientas veces, ya que nos está dando la vara desde 1952. Qué le vamos a hacer...

A destacar el famoso baile callejero bajo un diluvio del gran Gene Kelly, cantando eso de Singin in the rain…

Y para terminar, más lluvia, aunque esta vez de color  púrpura y en la voz de Prince, el excéntrico espárrago que, hay que reconocerlo, borda su Purple rain.Compuesta en 1984, se convirtió en su himno particular y en la canción por la que todos recordamos a este extravagante tirillas, que tiene que meterse piedras en los bolsillos para que no se lo lleve el viento.

 

Nota: he intentado bajar de you tube una actuación en directo de Prince y su Purple rain y me ha sido imposible. Así que solo he conseguido la canción, sin otra imagen que el boquerón con sombrero y mirada aviesa y maquillada. Lo siento.

Hasta mañana, más o menos a esta hora.