jueves, 26 de diciembre de 2013

BREVERISMOS. JUEVES 26 DE DICIEMBRE DE 2013

Si estáis por la provincia de Soria (no digo si vivís en ella puesto que ya conoceréis todo lo que voy a mostrar) bien ya sea de paso, de turismo o de lo que sea, es una buena ocasión para visitar San Baudelio de Berlanga.
       Situada a 78 kilómetros de Soria capital y cerca de la aldea Casillas de Berlanga, la ermita mozárabe se alza sobre un alto visible desde lejos para el visitante. A primera vista parece una construcción sencilla y tosca y en parte lo es… en su exterior, porque la sorpresa espera dentro.


       Es el interior lo que sobrecoge. Dentro, la impresión recibida es que aún es más pequeña de lo que parecía por fuera, en contra de la percepción habitual.


       El pequeño interior -80 metros cuadrados- sobrecoge por la profusión de columnas para soportar todo el peso de la tribuna del coro, que aparece para el visitante como una pequeña mezquita de arcos de herradura, un auténtico laberinto mínimo de columnas.

       Si bien el peso de la cubierta lo soporta una gran columna central que, a modo de palmera, que reparte la carga a través de sus ramas cubiertas de pinturas.


       Pero si su arquitectura es peculiar lo excepcional son sus pinturas, ejecutadas en el siglo XII… o lo que queda de ellas, por las cuales llegó a ser calificada de "Capilla Sixtina románica”.
       Las pinturas cubrían en su totalidad, sin que quedara un solo centímetro sin pintar, muros y techo representando todo tipo de temas.

      En esta recreación digital se puede apreciar en su esplendor cómo era el interior de la ermita en su época. Así es como la vieron los sorianos hace mil años, con todas sus pinturas brillando a la leve luz del día que entrara por la puerta abierta y por una pequeña ventana en arco de herradura, únicos focos de iluminación. 

       Contra todo lo que se podría imaginar las pinturas no representan motivos religiosos, como era habitual en la época, sino motivos de caza y adornos complementarios.



       Con animales como el oso, que probablemente aún habitaba los bosques y montes de la zona, y el más exótico camello.



       Y también con pinturas como el elefante y el guerrero.

       El mejor significado de las palabras expolio e ignorancia son las que se refieren a la historia de las pinturas de esta ermita. La ermita era propiedad de varios vecinos del pueblo y en 1925 fueron vendidas a un particular, arrancadas de sus muros, trasladadas a soportes transportables y revendidas a varios museos estadounidenses… con el beneplácito de la Iglesia y las autoridades de la época, a pesar de haber sido declarada en 1917 Monumento Nacional. Esta venta fue motivo de protesta de intelectuales y artistas, sin que sus protestas sirvieran de nada. El Tribunal Supremo falló a favor de la venta y dispersión del conjunto, permitiendo la salida del país de este tesoro artístico… como tantos otros, de los que quizá hable en otros blogs.

 

     Este vídeo, elaborado para el curso de Edición de Vídeo Digital de la UNED, es un trabajo espléndido que os aconsejo que veáis. 9  minutos de espléndido recorrido por el interior de la ermita.

        Algunas de las pinturas pudieron ser recuperadas en la segunda mitad del siglo XX, como en el caso de La Cacería, el Oso, el Camello y el Guerrero, que se pueden contemplar en el Museo del Prado de Madrid.
       La ermita fue adquirida en 1949 por la Fundación Lázaro Galdiano y donada al Estado. Gracias a dicha fundación se rehabilitó el interior y restauraron las pocas pinturas que quedaron. Con todo, el conjunto sobrecoge, sobre todo al pensar lo que pudo ser.

Breverismos

134)  LA CATEDRAL
La Catedral Metropolitana diseñada por el Arquitecto Más Moderno del Mundo era tan impresionante que los fieles, impresionados, no podían rezar.

2222)  ESPANTO Y BELLEZA
Antonio Gaudí construyó en León la Casa de los Botines… disparatado espanto que contribuyó a resaltar la belleza de la catedral gótica.

5909)  ARRIMAR EL HOMBRO
-¡Hay que arrimar el hombro! –exclamó el albañil. Y sus compañeros no solo arrimaron el hombro al muro que cedía, sino también unos potentes arbotantes que permitieron a la iglesia gótica llegar firme hasta nuestros días.


      Y la canción navideña de hoy es… Happy Christmas-War is over. Una versión un tanto engolada a cargo de los llamados Tres Tenores, es decir, Pavarotti, Carreras y Plácido Domingo, los llamados "avida dollars". En fin, yo me quedo con la versión original antibélica de John Lennon del otro día, con el impresionante coro de niños... dónde vas a comparar.

Mañana otro tema, ya veremos.

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