La abuela era seguidora de los Beatles y se ponía a gritar como una
posesa cuando, a los 16 años, los escuchaba… y no digamos si acudía a verlos en
directo, ahí ya el ataque de nervios estaba garantizado.
Y
ahora, 50 años después, esta señora que cuando era una adolescente insoportable
se ponía así al escuchar a los Beatles,
se enfada porque su nieta se pone histérica cuando escucha a One Direction. Aunque matiza:
-Es que hay grupos y
grupos. Y así como los Beatles eran
unos genios que cambiaron el rumbo de la música, los Direction estos son unos piernas que nadie recordará el año que
viene.
Y es que ya lo he dicho:
ahora su nieta y sus amigas se ponen así de histéricas cuando acuden a ver en
directo a One Direction, que cantaron
el viernes y sábado pasados en el estadio Vicente Calderón de Madrid.
One Direction es un grupo británico-irlandés prefabricado por un promotor avispado que los
vio en Factor X, ese programa cutre
que se repite con distintos nombres en las Teles
Cinco de todo el mundo. Vio su actuación, los reunió y les prometió fama y
riqueza (ahora no se puede decir que les prometió el Oro y el Moro porque es
frase considerada políticamente incorrecta).
Pues
bien, el grupo está formado por cinco veinteañeros que, apoyados en una
publicidad desorbitada en el campo de batalla de las redes sociales y en trucos
digitales de sonido están arrasando entre los adolescentes. Y el avispado
manager ha creado un más que lucrativo negocio del que los chavales reciben una
mínima parte, pues la parte del león se queda en manos de la corte de
chupasangres que los rodea.
Pero
como la publicidad funciona, pues ahí tenemos a las adolescentes españolas –no
todas, afortunadamente- que han hecho… ¡¡Dos
meses de cola!! en las puertas del Estadio Vicente Calderón para no perderse el
concierto. Pagando, además (bueno, ellas no, sus sufridos padres) entre 60 y
200 euros por entrada… y el día anterior al concierto se habían vendido más de
70.000. Pocos recuerdan una cola tan espectacular a las puertas del Calderón,
ni siquiera en los dos míticos conciertos de los Rolling Stones, allá por 1982. En fin…
Tiendas
de camping, esterillas, mantas y edredones, botellas de agua, la mesa de camilla, el armario de luna y neveras
portátiles llenan los aledaños del estadio, todo para sobrevivir los dos meses
de espera. Muchas de ellas son hijas y nietas de los que protestaban cuando
obreros en paro acampaban frente al ministerio de Trabajo, o protestan ahora
porque otra juventud bien distinta –afortunadamente- ocupa con toda razón la Puerta del Sol de Madrid.
Las primeras de la
cola –y escribo Las ya que el 90%
son chicas, según la policía municipal- llegaron la primera semana de mayo, ya
que la cita empezó a través de Twitter. Y ahí estuvieron, impertérritas, hasta
el viernes pasado.
En fin… dejémoslo
aquí, que la información ya está escrita y ha sido carne de telediarios y tertulias
en programas televisivos de esas de los que es mejor no hablar.
Breverismos
2395) CULPA DE TODO
El adolescente echaba a sus padres la culpa de todo… hasta
de su felicidad.
2425) EL REY DE LA CASA
Considerado el
rey de la casa desde que nació, el adolescente maltrató a sus padres primero como
si fueran sus súbditos, sus criados después y finalmente enemigos a exterminar.
2456) COSAS DE NIÑOS
-Ya sabes, cosas
de niños –dijo la madre, arrobada, mientras se desclavaba el cuchillo de la
espalda.
Y aquí tenéis una cancioncilla de los One Direction, titulada YOU & I, sin más
pretensiones. Masticable y digerible. Pero ahí va, para que no se diga que tengo manía a los chavales.
Mañana viernes tocaremos otro tema.
Además de no haber oído One Direction, que las direcciones son otras y para tratar de orientarme en espacio, tiempo y otros puntos cardinales, leo tu blog con frecuencia, y caigo en cuenta que a los jubilados, retirados y pensionados -a los que ya nos da lo mismo feriados y fiestas de guardar, que a mi edad todavía no se que se qué o dónde se guardaba- nos encontramos que hoy es jueves, aquí en América y ayer era julio. Pero por eso, y otras razones mas me gusta leerte para tener otra perspectiva de lo que pasa y pasó. Un abrazo.
ResponderEliminarSi de perspectiva se trata estoy servido pues el dibujo -el geométrico y el artístico- entró en mi vida sin permiso y, además, para quedarse. Así que, jubiloso jubilado americano, encantado estoy con que me sigas desde tan lejos, desde allende la procelosa mar océana.
ResponderEliminarPor cierto (publicidad) mi novela ya está en digital en Amazon... o eso me han dicho, o vete tú a saber.
A ver cuando vienes con mi querida Tensi para volver a recorrer las salas de El Escorial, ahora que reina otro Felipe, es de esperar que menos siniestro que aquel que edificó el mamotreto de granito.
Abrazos suaves, que con este calor...
Quino