viernes, 27 de septiembre de 2013

BREVERISMOS. VIERNES 27 DE SEPTIEMBRE DE 2013

El blog de hoy se podría llamar Padres con buenos hijos o bien Hijos con buenos padres, elegid vosotros.
     Lo cierto es que el tema me lo han regalado dos realizadores de cine, uno de Madrid y el otro  Barcelona. Me refiero a David Trueba y a José Antonio Bayona. Los traigo al blog por tener una agradecida opinión sobre sus padres y porque ambos, ensalzan la figura del maestro y del profesor de la Enseñanza Pública, tan interesadamente denostada hoy. Y hablo por sus bocas.


Trueba dice que recuerda con orgullo a la generación de sus padres que admiraban a aquellos que tenían la formación que ellos no tenían. "Recuerdo la mirada desde su incultura, o su falta de preparación, hacia ese tipo de profesores que sabían latín y griego y cómo nos empujaron nuestros padres hacia esas esferas".
     "Admiro el impulso de mis padres por colocarnos en el mundo, por apartar los miedos, por ser uno mismo sin preocupaciones. ¿Cómo lo consiguieron? Me lo he preguntado muchas veces porque su caso tiene mucho más mérito que el mío. Mi madre ni siquiera pasó por la escuela y recuerdo el esfuerzo heroico por firmar con su nombre mis notas escolares. No se sentía avergonzada y lo que te transmitía era que tú eras un privilegiado". "Gracias a su sensibilidad mis hermanos y yo supimos que había otra forma de vivir"


Trueba  estrena película, una historia real, titulada Vivir es fácil, que cuenta la historia de un profesor de inglés que, en 1966, ponía en sus clases canciones de los Beatles. Y su viaje hasta Almería, para conocer a John Lennon que rodaba allí una película.
     Y ya que habla de maestros, añade: "Es curioso que a estas alturas haya que reivindicar el papel del maestro. Me parece asombroso hasta qué punto la estafa generalizada ha irrumpido no solo con valores económicos o políticos sino en la vida cotidiana desprestigiando a los maestros, a la gente más preparada o más valiosa. La película no es tanto un homenaje al maestro sino un acto de justicia hacia esos personajes que, normalmente, no aparecen en una película porque estamos demasiado ocupados en contar las glorias de los héroes y nos olvidamos de que la vida se compone de aquellos que hacen bien su trabajo en silencio. Aquellos que Borges llamaba los justos".   


 José Antonio Bayona recibió el pasado sábado el Premio Nacional de Cinematografía de manos del ministro de cultura, el muy citado en este blog, don José Ignacio Wert. Y al tomar la palabra para agradecer el premio, Bayona habló de los sacrificios de sus padres que tuvieron que dejar de estudiar para trabajar y que olvidaron sus sueños artísticos al tener que sacar adelante una familia. "A mi padre le hubiera encantado ingresar en una facultad de Bellas Artes, pero solo tuvo dinero para suscribirse a un curso de dibujo por fascículos. Al final se ganó la vida como pintor de brocha gorda, pero mi padre es un artista. Y todos sus esfuerzos fueron para que sus hijos prosperaran. Mis padres son mis héroes. Entendieron mejor que nadie que la educación no es un gasto sino una inversión". "No llegaremos a ningún sitio si no consideramos la cultura y la educación como los cimientos sobre los que aposentar nuestra sociedad". Tomemos conciencia de lo que está fallando, estamos a tiempo de actuar".
     La ovación fue espectacular, incluidos los aplausos tibios del ministro Wert, probablemente porque no le quedaba más remedio. 
     Observad, además, la diferencia de gestos entre el premiado y el ministro más impresentable del actual gabinete.


Aunque ya sé que no hace falta, recomiendo, porque viene a cuento, la espectacular película de Bayona Lo imposible. Yo no la he visto porque, lo confieso, soy reacio a ver películas de catástrofes... pero aplaudo a un buen realizador.




     Las dos historias, le de Trueba y la de Bayona, están basadas en hechos reales... pero me quedo con la primera porque su sencillez es abrumadora. Y porque en Almería compuso John Lennon su canción  Strawberry Fields Forever.


No os perdáis los 30 segundos finales, cuando parece que ya ha terminado la canción.

Breverismos

843)  MASTER EN DERECHO
Se dio de baja en el Master en Derecho y aún no ha parado de correr, al enterarse que los impartirían “magistrados y fiscales de los más altos tribunales, y prestigiosos abogados".


2577) DERECHO A SABER
Reclamó con tanta vehemencia su derecho a saber que cuando lo consiguió ya no tenía fuerzas para aprender nada.


2631) APRENDER CON EL TIEMPO
Todo lo que sabía lo aprendió con el tiempo, pero tardó tanto que no le dio tiempo a aprender prácticamente nada.

El lunes más. Y más corto que hoy se me ha ido la tecla y tengo seguidores que protestan.

7 comentarios:

  1. Aquí estamos otra vez Marinieves y yo, que ya sabes que somos compañeros de instituto. Muy bien lo de Trueba y sobre todo lo de Bayona y sus andanadas contra Wert, Nos gustan mucho tus blogs sobre educación aunque entendemos que es mucho mejor que sean tan variados.
    Un abrazo
    Pedro

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  2. Aquí estoy yo también. Y como ya lo ha dicho todo Pedro solo añadir que te has olvidado poner la canción de John Lennon. Pero no pasa nada porque la conocemos y nos gusta y has hecho muy bien en recomendarla.
    Abrazos y besos de tu seguidora que aunque me de pereza muchas veces escribirte te sigo encantada todos los días-

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  3. Tengo varios amigos que son Maestros y lo escribo así, con mayúscula, porque entiendo también que es la vocación/profesión mas importante, puesto que de su aptitud y actitud depende el que los alumnos entiendan la importancia del conocimiento.
    Lamentablemente, desee hace muchos años, todos los españoles hemos sufrido en primera persona o por aproximación, las genialidades de los políticos que, argumentando querer sacar al pais de la ignorancia no han hecho otra cosa que experimentar, con el agravante de que lo han hecho no con productos sino con personas.

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    1. Gracias a los tres por vuestras palabras y coincidencias. Y como tú, Paco, creo que el Maestro -también con mayúscula- debería ser considerado y respetado como se merece. Pero ya sabes, en política se dice que los cargos son como las estanterías: cuanto más altas más inútiles. Habría que recordarles que un día fueron al colegio... los que fueran, que empiezo a creer que, por su actitud, los títulos les tocaron en la tómbola.
      Y sí, es verdad, estoy para el tinte: se me olvidó poner la canción de John Lennon, así que el lunes la pondré. Abrazos triplicados.
      Quino

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  4. Perdón por la extensión. Es tan fácil como no leerlo si abruma el largo de la cuestión.
    Me parece que hoy y a mi pesar la polémica la voy a generar yo, puede que incluso provoque desagrado. La escuela pública sufre un problema político, el mismo de siempre por otra parte cuando los gobiernos son de derechas. Y hablan de educación cuando se quiere hablar de otra cosa. Es donde siempre se mete mano primero. Ahí yo veo un recorte social de primer grado, un retroceso en lo adquirido, escuela pública, gratuita, libre y de calidad.
    Me cuesta mucho defender a los gremios sean cuales sean pero no me cuesta nada defender a las personas. Quizá no sea solidaria. No lo sé. Y lo que voy a decir es común en todos los gremios pero este me interesa más.
    Por eso abordo otra perspectiva de la escuela. Creo que todas las escuelas, públicas, privadas y concertadas comparten otro problema que las unifica, que está dentro y no fuera. No soy lo que se entiende como maestra o profesora aunque yo así me sienta. He vivido los colegios públicos y concertados y privados desde una posición rara, que ni dentro ni fuera. Pero he observado y de esa observación nace mi reflexión.
    Conozco dos mujeres catedráticas, ninguna ha pasado por la Universidad, pero las dos enseñarían lo imprescindible en cualquier ciclo educativo. La sociedad no las contemplaría jamás como educadoras, pero sí contempla como gremio a defender a otro ser humano que también conozco, que no se quita la camiseta verde, joven, (es solo un ejemplo, qué más da) con oposición de maestro aprobada que dijo al paso de su fila por delante de él con los brazos cruzados y una cara que voy a tardar en olvidar “¡Qué asco!” Y no hay nada ni nadie que controle que esa persona no debe tener sitio en ninguna escuela si sus alumnos le dan asco.
    Conozco profesores que tienen imposibilidad de conseguir que sus hijos se parezcan a aquello que reconocen imprescindible para los hijos de los otros, incapaces de resolver su propia vida pero que se les llena la boca hablando de empatía, mediación y méritos conseguidos y que solamente adquieren valor en la distancia que les marca un grupo de sillas y su mesa aunque nunca se sienten, que enseñan que los conflictos se han de resolver a ser posible hablando y conciliando y su vida es justo lo contrario, personas a las que fuera del aula les cuesta mantener relaciones normales con sus congéneres. Ah!!! Cuánto artisteo y cuánta máscara te puedes permitir con ese público tan dócil, por fin puede uno ser el rey y tener su momento diario de gloria. ¿Con qué cara se presentan cada día a trabajar? Y me da igual en qué tipo de escuela estén, están en todas.
    Conozco profesores y maestros que estigmatizan para el resto de su vida a muchos alumnos.
    Conozco maestros, que dan vida a todo lo que tocan, que levantan lo que otros pisotean, que hacen que los lápices sean pájaros y los libros el paraíso. Que provocan el sueño con sus palabras de lo apacibles que son. Que ayudan a construir seres humanos valiosos e importantes por sí mismos.
    “Como una novela” y “Mal de escuela” de Daniel Pennac. Hay demasiados educadores que no entienden el amor del que habla Pennac como primera y fundamental premisa.
    El rango más alto desprecia en muchas ocasiones al más importante. Los primeros siete años de un ser humanos son fundamentales, entonces ¿cómo entender eso? Esto es como una pirámide solo que está al revés. Yo creo que Maruenda es menos importante en la vida de ningún ser humano que Juanita o Pepa, maestras de Primaria.
    Hay que estar y ser muy sano para ejercer esta profesión y no hay nada que lo garantice.Aquí cada uno se cree mejor que los demás. Pero esto no es exclusivo de nadie, así de chulos y egocéntricos y engreídos somos los humanos.
    Yo voy a defender un sistema en el que creo, que es público, pero no a gremios. Solo a personas. Y sería muy, muy exigente con sus componentes. Es demasiado importante como para ser transigente.
    Un beso
    Isabel

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    1. Ya me extrañaba que estuvieras tanto tiempo con la tecla reprimido-retenida.
      Así que, bienvenida de nuevo y ya te contestaré otro día, que el blog de Messi me ha dejado muy mal cuerpo.
      Quino

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  5. Me echabas de menos desgarramantas!!! Estoy siempre, más o menos operativa pero estoy. Mil besos . Isabel

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