-¿Me van a cobrar 8 euros por entrar en una
iglesia?
-No es una iglesia, es una mezquita.
-Y qué hace usted vestido de cura y pidiéndome
dinero, ¿dónde están el turbante y las babuchas?
-Bueno… he querido decir que es un monumento
nacional.
-Muy bien, entonces usted sobra.
-Pero es que además es Patrimonio Cultural de la Humanidad.
-Razón de más para que no me cobren: yo formo
parte de esa humanidad.
-¡Policía! ¡Llévense a este agitador!
Esto suele pasar a las puertas de la Mezquita de Córdoba, por más que la Iglesia se empeñe en
llamarla Catedral de la
Asunción de Nuestra Señora.
La mezquita se
empezó a construir en el año 785 en la ciudad de Córdoba, sobre el solar que
ocupaba la iglesia visigótica de San
Vicente Mártir, el templo más importante de la ciudad desde el siglo V. A
lo largo de los siglos, durante el Emirato y el Califato, fueron haciéndose
ampliaciones hasta que en el año 1236 la Reconquista llegó a la ciudad y la reconvirtió en
iglesia católica.
Si bien en un principio pensaron
derribarla, llegaron a la conclusión de que era más práctico reconvertirla, y
así se ahorraban la construcción de una catedral como santo y seña de haber
conquistado tan importante emporio musulmán.
En 1523 comenzaron las obras de una basílica de estilo
renacentista en el centro del edificio, si bien siguieron construyéndose
añadidos hasta llegar a los 24.000 metros
cuadrados que ocupa hoy. Era la tercera mezquita
(yo sigo diciendo mezquita) más grande del mundo, solo por detrás de la de La Meca
y de la Mezquita Azul de
Estambul. El año citado se produjo la
mayor intervención en el edificio. Se construyó la gran nave para albergar
definitivamente el gran templo católico, destruyendo gran parte de lo
existente. Tal decisión provocó controversia, tanta, que hasta el mismo
emperador Carlos V protestó con su
famosa frase: Habéis destruido lo que era
único en el mundo, y habéis puesto en su lugar lo que se puede ver en todas
partes.
Está considerado el monumento más
importante de la arquitectura andalusí, junto con la Alhambra
de Granada, y uno de los grandes monumentos españoles, pues en suelo español
está.
En la Historia del Arte es de
sobra conocida la sala de columnas. La mezquita, al ser el monumento más visitado
de España, está considerado Bien de Interés Cultural como el primer espacio de
interés turístico y cultural de Europa. Además, y lo más importante, es desde
1984 Patrimonio Cultural de la Humanidad , declarado
como tal por la Unesco.
A través de sus muchas puertas se puede acceder a su
interior, pero por la Puerta de Las Palmas se entra al espacio
característico y sorprendente de la mezquita: el bosque de 1.300 columnas de
jaspe, mármol y granito sobre las que apoyan 365 arcos de herradura bicolores,
rojos por el color del ladrillo y amarillos de la piedra caliza, si bien están
policromados para dotarlos de mayor realce.
En realidad,
los árabes utilizaron materiales de acarreo para gran parte de la construcción,
ya que las columnas y los capiteles son romanos y visigodos, aprovechados de
otras construcciones.
El primer
constructor fue Abderramán I en el
año 780 y concluida por Almanzor a
finales del siglo X, con ampliaciones entre medias de Hisham I, Abderramán II,
Abderramán III, Alhakén II y el citado Almanzor,
que se veía que entonces, como ahora, los prebostes querían pasar a la Historia por edificar
grandes construcciones.
En fin,
todo esto ya es conocido o puede ser consultado en cualquier libro de Historia
del Arte o guía turística, y yo solo he querido dar un paseo con vosotros. Pero sí quiero informar que ha surgido en Córdoba una
plataforma ciudadana contra le decisión de la Iglesia de denominar a la
mezquita solamente como catedral, silenciado así cinco siglos de arte e
historia musulmana.
Además, en su
hipocresía, el cabildo no cobra los 8 euros como entrada de admisión (prohibido
en los lugares de culto) sino como “donativo” (obligatorio) que, como tal, pasa
directamente a las arcas del Cabildo… sin declarar a Hacienda. Pingüe negocio,
dado que la mezquita recibe 1.400.000 visitas de turistas al año, que
multiplicado por 8…
A todo esto:
¿Qué dirán la Unesco y el Papa Francisco de todo esto? Un día de
estos tengo que preguntárselo.
Breverismos
1284) EN EL FONDO
Sentía un
respeto tan profundo por la
Iglesia , pero tan profundo, que lo perdió en el fondo… y en
la forma.
2224) CON LA IGLESIA HEMOS TOPADO
-¡Con la Iglesia hemos topado!
–exclamó, al estrellarse con su coche
contra la catedral.
2940) DESCRÉDITO
Mañana hablaremos de
otro temilla (el que quiera saber lo que opino sobre la manipulación de la
figura del expresidente Suárez por parte de los fariseos, que me visite en
Twitter: @QuinoCollantes
Gracias, amigo Quino: te escribo desde Córdoba y aunque no entro en tu blog tanto como quisiera hoy quiero escribirte para agradecerte tu solidaridad con el movimiento ciudadano a favor de la entrega de la mezquita al pueblo de Cordoba, su verdadero dueño.
ResponderEliminarGracias otra vez y recibe un fuerte abrazo cordobés, o sea, de verdad.